CHILE

Rutas guiadas por reservas poco transitadas, navegación por canales vírgenes y encuentros con fauna local. Lugares donde la naturaleza es protagonista y la conservación, parte del viaje.

Trekking en parques desconocidos, kayak entre islas del sur o travesías por glaciares. Para quienes quieren moverse, sentir el cuerpo y ganar vistas únicas.

En Bahía Inglesa, las aguas turquesa contrastan con el desierto y las calas invitan a parar el tiempo.

Más al sur, Pichilemu combina surf pausado, gastronomía local y cabañas junto al mar donde los días se deslizan sin prisa.

Descubre historias tejidas entre el desierto y la costa. Arquitectura local, arte contemporáneo y memorias vivas en barrios y pueblos con identidad propia.Sumérgete en el legado mapuche, descubre la poesía urbana de Santiago o recorre pueblos mineros del norte con guías locales. Una forma profunda de entender el alma de Chile.

Convivencias en pueblos rurales, talleres de oficios tradicionales, apoyo a iniciativas locales o estancias con proyectos educativos. Una forma de viajar que deja huella, también en quien la vive. Visitas a cooperativas rurales, oficios que se transmiten en talleres y alojamientos que generan valor local. Una forma de viajar que transforma y se deja transformar.

Cocina con producto del mar, sabores de la tierra y vinos naturales en viñedos pequeños. Viajes donde cada comida cuenta una historia del lugar.

Desde mariscos frescos en caletas del Pacífico hasta cocina mapuche y vinos de autor en Itata. Viajes donde la tierra y el mar se expresan en cada bocado y cada copa.

Relájate en termas naturales entre bosques nativos, practica yoga frente al volcán Villarrica o prueba rituales ancestrales en spas integrados en la naturaleza. Ideal para reconectar cuerpo y mente.

Baños termales en plena cordillera, retiros de silencio en bosques australes o yoga frente a lagos cristalinos. Espacios para parar, respirar y volver a ti.