
VIAJE DE NOVIOS A
SRI LANKA Y MALDIVAS
Amor entre selvas, espiritualidad budista y lagunas
Este viaje está pensado para parejas que buscan algo más que descanso: una luna de miel que inspire, que emocione, que conecte. Sri Lanka seduce con sus templos antiguos, su vida salvaje y su hospitalidad profunda. Cada jornada es un viaje hacia la esencia: desde plantaciones de té hasta trenes que se deslizan entre montañas. El final, en Maldivas, es pura contemplación: el mar, el silencio, la luz. Una ruta que equilibra aventura y serenidad, descubrimiento y conexión.

Destinos
Kotugoda – Anuradhapura – Kandy – Haputale – Yala – Weligama – Colombo – Maldivas
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Negombo, descanso junto al mar
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Sigiriya, exploración cultural y paisajes sagrados
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Kandy, corazón espiritual de la isla
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Nuwara Eliya, plantaciones de té y tren panorámico
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Yala, safari y naturaleza salvaje
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Maldivas, descanso absoluto sobre el agua

Kotugoda: bienvenida entre jardines coloniales
Una llegada tranquila y elegante a Sri Lanka. En Kotugoda, lejos del bullicio urbano, una casa colonial convertida en hotel os espera con calma, vegetación tropical y un servicio impecable. Es el lugar perfecto para adaptarse al nuevo ritmo y descansar antes de iniciar la ruta por el corazón cultural del país.
Experiencias sugeridas: masaje ayurvédico, paseo al atardecer por los jardines, cena privada en el patio
Anuradhapura: espiritualidad viva entre dagobas y árboles sagrados
Una de las ciudades más antiguas del mundo, donde la devoción budista no es pasado, sino presente. Recorrer Anuradhapura es hacerlo entre estupas blancas, raíces milenarias y peregrinos descalzos que caminan en silencio. Aquí, la historia y lo sagrado se funden en una atmósfera serena y poderosa.
Experiencias sugeridas: visita al Sri Maha Bodhi (árbol sagrado), paseo en bicicleta por el sitio arqueológico, puesta de sol en Mihintale


Kandy: rituales, jardines y legado real en el corazón de la isla
Kandy es el alma cultural de Sri Lanka. Un lago, un templo que guarda el diente de Buda y colinas verdes que la rodean como una corona. El ritmo de la ciudad invita a la contemplación: mercados de especias, ceremonias budistas, música tradicional y un entorno natural exuberante.
Experiencias sugeridas: ceremonia nocturna en el Templo del Diente, visita al jardín botánico de Peradeniya, clase de cocina cingalesa
Haputale: plantaciones de té, niebla y trenes de otro tiempo
Un viaje en tren panorámico os llevará hasta las Tierras Altas, donde la niebla envuelve colinas verdes y el tiempo parece haberse detenido. Haputale es un paisaje para explorar con calma, entre campos de té, casas coloniales y cielos abiertos.
Experiencias sugeridas: caminata a Lipton’s Seat, visita a fábrica de té con cata, picnic en las plantaciones


Yala: naturaleza salvaje, leopardos y noches bajo las estrellas
En Yala, el escenario cambia: sabanas doradas, lagunas escondidas y la promesa de encuentros con elefantes, osos y leopardos. Dormir aquí es escuchar la selva, saborear la aventura y vivir la emoción del safari sin renunciar al confort.
Experiencias sugeridas: safari privado al amanecer y al atardecer, cena tipo bush, encuentro con naturalistas locales
Weligama: olas suaves y tiempo para parar
Tras el rugido de la naturaleza, llega el mar. Weligama ofrece una costa amplia, ritmo relajado y hoteles boutique donde cada detalle invita al descanso. Es el lugar perfecto para flotar en el agua, leer con los pies en la arena y saborear el sur de Sri Lanka sin prisas.
Experiencias sugeridas: clase de surf o yoga, masaje frente al mar, paseo en barca al atardecer


Colombo: escala elegante entre arte, historia y diseño
La capital ofrece una noche para cerrar Sri Lanka con estilo. Colombo es arte contemporáneo, arquitectura colonial, cafés de autor y tiendas con identidad. Un recorrido privado os mostrará el lado más estético, vibrante y moderno del país.
Experiencias sugeridas: tour cultural con guía local, cena en Ministry of Crab, visita a galerías y concept stores
Maldivas: epílogo sobre el agua, silencio absoluto y belleza sin esfuerzo
El viaje culmina en una villa sobre el mar donde el tiempo desaparece. En Maldivas, cada amanecer es un regalo, cada baño es un ritual y cada cena una celebración íntima. El paraíso existe, y está diseñado para dos.
Experiencias sugeridas: snorkel en arrecifes vírgenes, masaje en pareja, cena privada en la playa



Cómo se vive este viaje
Este viaje está pensado para quienes desean algo más que descanso: experiencias que transforman, lugares que invitan al asombro, alojamientos que inspiran calma y conexión. En Sri Lanka, cada etapa combina lo sensorial con lo espiritual: templos sagrados, plantaciones de té, encuentros con elefantes y rutas entre selvas y montañas. En Maldivas, el ritmo se ralentiza: aguas turquesa, villas sobre el mar y cenas descalzos sobre la arena. Todo está cuidado para que lo viváis con presencia. Porque celebrar el amor también es celebrar el viaje.
Detalles prácticos
Duración recomendada: 14 noches / 15 días
Nivel físico: Bajo – Medio (algunas caminatas opcionales)
Época ideal: De diciembre a abril (monzón invertido) y de julio a septiembre
Tipo de viaje: Privado, 100 % a medida
Incluye:
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Alojamientos boutique y de lujo cuidadosamente seleccionados
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Todos los traslados terrestres y vuelos internos
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Experiencias privadas en cada destino
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Servicio de asistencia local 24/7
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Pensión completa o media según el destino
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Actividades culturales, de naturaleza y bienestar curadas especialmente